sábado, 14 de septiembre de 2013


Algo constante, algo silente.
Aquello que no se busca, que no quiere, que es. 
Por qué te consumes, por qué te aligeras.
Quiero un ancla que me hunda, me sumerja. 
Profundidades oceánicas, vientos de tormenta. 
Aquello que mueva, que destruya a pedazos y reconstruya con piezas nuevas. 
Y vuelva de mi un arroyo cuya corriente jamás se detenga, un híbrido, una mágica mezcla. 





        


Costará seguir, viviendo en la permanente conciencia de la inconsciencia.
Desconociendo el valor pleno de lo eterno.
Estancados en la superficie de un suspiro, admiradores de lo efímero.
¿De qué servirá contestarle a las voces?
No oyen, ya no escuchan, sólo esperan.
Fieles creyentes de nada, seguidores de todo, inundados de vacío. 

martes, 10 de septiembre de 2013












Mismo juego, misma trampa, 
mismos idiotas que buscan caer. 
Misma intensión perdida, 
palabras repetidas, besos de ayer.
Reviviendo el eterno dejavú de instantes efímeros. 
Mismas heridas, misma pasión.
Igual desenlace, misma despedida sin prevención. 


lunes, 9 de septiembre de 2013


"Un paraíso cuyos cielos eran del color de las llamas del infierno."

Si el tempestuoso destino promete tu compañía, llévame.
Ardamos juntos en el fuego de aquello que desconocemos. 
Nuestros cuerpos hablan, se retuercen.
La pasión diluye todo instinto racional, en brasas se transforma.
Seres de la noche se apoderan de nuestras almas. 
Y hasta un cielo es este infierno con tus manos en mi cuerpo.
Incinérame con tus besos de diablo, llamas al tacto, quémame. 



domingo, 1 de septiembre de 2013





"Si te asomas por la ventana, verás que estoy haciendo señales de humo en dirección a tu casa."


Mi ventana no es mi ventana.
En mi ventana escogida sin querer, el amanecer se escurre con un verde resplandor.
La brisa no es mi brisa, es viento de un sábado todo el día.
El sol no quema ni calienta, tan sólo ilumina y purifica lo que está y estará.
Mi ventana no es mi ventana.
La nueva, con su juego de sombras y luces, me gusta más.