viernes, 10 de agosto de 2012

Víctima de las palabras. 
De una historia confirmada por muchos, 
creada por nadie.
Rumores de un autor anónimo,
redactor de mi llanto.
Entre papeles estrujados 
ha perdido el borrador de mi historia.
Y tratando de reescribirla, 
ha entremezclado la novela de amor con un cuento de terror.
Huyo de mis propias líneas, 
me oculto de mis párrafos.
En mi cuento, donde las hadas se esfumaron, 
dejando sólo ogros y monstruos vagando en letras vacías.
Para siempre y por siempre, refugiada en un continuará. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario